domingo, 4 de marzo de 2012

siurana

esta semana ha sido el mobile world congress y me he agarrado a todas las fiestas que había por la noche, lo que ha supuesto que este finde no tuviera la mínima intención de ponerme a hacer ejercicio. además, ayer, nos fuimos a una calçotada en La Riba, Tarragona.... vamos, el resumen de la semana: deporte -25, relaciones sociales +125.

la semana pasada tampoco pude hacer gran cosa; mis amigos estaban en Siurana escalando, y como yo no podía cogerme el finde completo, me fui el sábado por la mañana y regresé por la tarde. Cuando llegué, vi a Victor y Marcos colgados en la roca... estaban todos. empecé con un 5+ que se las traía pero pude hacerla de primera encadenándola. Cuando me iba a poner con un 6A, llegaron dos chicos; el más joven se puso con el quinto; yo iba subiendo hasta que llegué a un punto en el que no lo veía claro y me paré. entonces miré a un lado y vi como el chico del quinto caía hasta abajo y al llegar al suelo, gritó: MIERDA, tenéis que llevarme a un hospital!! al principio pensé que estaba exagerando, pero de pronto, desde ahí arriba pude ver que le faltaba el dedo. 

No llevábamos grandes cosas en el botiquín pero Ali tenía unas gasas y se las pudimos poner. Después nos dijeron que lo ideal hubiese sido echarle suero a la herida. La ambulancia vino en seguida y se lo llevaron. 

Para mí lo más alucinante fue la reacción del chaval. Al principio gritó y pataleó hasta que se calmó y entonces pudo gestionar su dolor con tanta frialdad que a mi me alucinaba. Pidió agua y chocolate y no se quejó de su mano más. Pocas veces he visto tanta entereza. 

Nunca me había puesto a pensar que podría arrancarme un dedo escalando. Muchas veces he pensado en un mal golpe; incluso en la posibilidad de la muerte debido a una mala caída, pero nunca en la amputación de parte de tu cuerpo. En la ambulancia, le dijeron que sería muy difícil volver a ponérselo. Me dio tanta pena; parecía muy buena gente y siendo tan niño....

seguimos escalando un rato más; hice el 6a, intenté un 6b para ver lo que era y al final del día hice otro 5+, muy bonito. Luego regresé sola en el coche, hablando por teléfono, evitando pensar la crueldad de la realidad vivida.